Tweet
Un mundo de psiquiatras...
"Mundo de sabios y de locos" cantaba 95 Norte allá por los 90s y no podían haber sido tan proféticas sus palabras casi 30 años después. Justamente para aquella época se levantaba la estrella de una jovencita a quien todos consideraron la Princesa del Pop, Britney Spears, un icono para la cultura del momento. No sospechariamos que, luego de los espectáculos, las luces, y los bailes al ritmo de "One more time#, está belleza norteamericana terminaria siendo superada por el dinero y la fama. Tras hundirse en los vicios, raparse la cabeza y salir lloriqueando por los hijos que no supo criar, esta cantante de 43 años, ha dicho en sus redes que se autopercibe como una niña de 5 años lista para ir al kinder.
Por supuesto que estas afirmaciones, para nada chistosas, no solo representan el anhelo de una enferma mental por hacer una regresión ante el desastre de su vida (mostrando con ello una desvinculación de la realidad), sino que resultan ser el desenlace de lo que venimos criticando antes: si todo se deja a la percepción de cada cual, entonces no solo puede un hombre creerse mujer y participar en concursos de belleza o competiciones femeninas, sino que debemos respetar al que se cree caballo, y a quien se autopercibe como niñato.
Y claro, aceptar esto es también reconocer lo otro. Y tendremos que dejar a que un tipo le parta la nariz a una mujer en el ring, o se cambie en el vestuario de las adolescentes (aunque sea un tío de 50 y tantos). Y en el caso de Britney Spears, tapar lo obvio con la mano y olvidarnos de que esta "niña de cinco" tiene dos matrimonios encima, cinco novios detrás, dos hijos delante (que son mas viejos que ella, por cierto) y una trayectoria que le supera por tres décadas (sin mencionar que ya se lengueteo con Madonna).
Así que, ante tales evidencias, solo nos queda concluir con las proféticas palabras del grupo musical antes mencionado: "Mundo de sabios o de locos, dónde los malos son los mejores y los enfermos los doctores, es un mal que no tiene cura si las tinieblas son las que alumbran (...) Se libera un Barrabás para condenar a un justo. Si estrella se creen los brutos, dónde vamos a parar?" Es un mundo de psiquiatras; un mundo al revés; un "mundo extraño".
Por supuesto que estas afirmaciones, para nada chistosas, no solo representan el anhelo de una enferma mental por hacer una regresión ante el desastre de su vida (mostrando con ello una desvinculación de la realidad), sino que resultan ser el desenlace de lo que venimos criticando antes: si todo se deja a la percepción de cada cual, entonces no solo puede un hombre creerse mujer y participar en concursos de belleza o competiciones femeninas, sino que debemos respetar al que se cree caballo, y a quien se autopercibe como niñato.
Y claro, aceptar esto es también reconocer lo otro. Y tendremos que dejar a que un tipo le parta la nariz a una mujer en el ring, o se cambie en el vestuario de las adolescentes (aunque sea un tío de 50 y tantos). Y en el caso de Britney Spears, tapar lo obvio con la mano y olvidarnos de que esta "niña de cinco" tiene dos matrimonios encima, cinco novios detrás, dos hijos delante (que son mas viejos que ella, por cierto) y una trayectoria que le supera por tres décadas (sin mencionar que ya se lengueteo con Madonna).
Así que, ante tales evidencias, solo nos queda concluir con las proféticas palabras del grupo musical antes mencionado: "Mundo de sabios o de locos, dónde los malos son los mejores y los enfermos los doctores, es un mal que no tiene cura si las tinieblas son las que alumbran (...) Se libera un Barrabás para condenar a un justo. Si estrella se creen los brutos, dónde vamos a parar?" Es un mundo de psiquiatras; un mundo al revés; un "mundo extraño".